Alteraciones Menstruales

Las alteraciones menstruales por desgracia, son mas comunes de lo que podamos pensar.

Es habitual, que una paciente que acude a la consulta por cualquier motivo, al hacer su historia clínica nos desvele cualquier alteración en la regla.

Hay muchos motivos para ello, y desde luego momentos en los que hay más probabilidad de algún tipo de dolencia o alteración como en la pubertad con la primera menstruación y en la menopausia. Entre medias, con doble razón las menstruaciones deben ser indoloras, regulares en tiempo, cantidad, aspecto (color, sin coágulos), etc.

Sin embargo muchas jóvenes padecen de metrorrágias (reglas anormalmente abundantes), escasas, con coágulos, mal olientes, oscuras, irregulares, incluso problemas más complejos como la desaparición temporal (amenorrea) a veces más de un año, o la repetición de la regla (dos o más menstruaciones por mes).

Para ello puede haber varias causas, siempre según la Medicina Oriental. Alteración del hígado es lo más corriente, pero suele estar siempre complicado con los riñones, y otros órganos.

Para descubrir la causa, normalmente las pacientes acuden a su ginecólogo y empiezan a realizarles todo tipo de pruebas y exploraciones, necesarias siempre para descartar problemas mayores como miomas, cáncer, displasias en el cuello del útero, etc. Sin embargo, muchas veces sus valiosos esfuerzos resultan infructuosos, ya sea por no encontrar causa alguna, o en el peor de los casos por no resolver el cuadro con la farmacopea tradicional.

Una parte que nos gusta mucho de la medicina que practicamos, personalmente me fascina, me encanta, es tratar digamos casos comprometidos, sin siquiera haber tenido nunca que descubrirse la paciente.

Si no hay una causa mayor en el caso de las metrorragias, como por ejemplo el llevar un dispositivo intrauterino (D.I.U), normalmente se solventa con un éxito notable.

En las disfunciones amenorreicas, escasas o totales, la efectividad está garantizada prácticamente en todos los casos. Las irregularidades temporales, también son fácilmente tratadas. El dolor menstrual o previo, desaparece inmediatamente después de colocar las agujas.

Con todo ello, nos sentimos felices cuando podemos tratar órganos internos, o zonas íntimas sin tener siquiera que ver a la mujer en cuestión. Es como cuando uno pretende encender la luz de una habitación, no toca la bombilla, toca, acciona el interruptor prácticamente en el 95% de los casos, pero otras veces vamos directamente a la bombilla por estar fundida.

En los casos en los que el útero ya está muy dañado, lo más indicado será la histerectomía.

Nuestras pacientes se encuentran muy agradecidas por cuidar de sus aspectos más íntimos de forma tan delicada.

Gracias a vosotras por la confianza y entrega que nos brindáis todos los días.